Ahora que estoy con la campaña, he reflexionado mucho acerca de cuán agradecida he sido con los que me rodean, especialmente con mis hermanas de la iglesia.
¿Cuántas veces he agradecido a mi hermana por esforzarse en predicar a pesar de sus circunstancias, por estar siempre disponible y por mandarme siempre un mensaje agradeciéndome cualquier detalle que tengo hacia ella? Hoy, estando juntas, pude darme cuenta de que cada una de mis hermanas vive una situación diferente a la mía, y nunca lo había considerado. Ahora sé que debo hacerlo, y en cada oportunidad agradecerles aún más. Gracias... Una palabra muy corta que puede hacer una gran diferencia en las personas. Si se dice con amor y alegría, puede impactar al mundo entero. Incluso repetirla me hace sentir feliz. 😊
Gracias, gracias. 😊