En el frío invierno, envié saludos y apoyo a mi jefe y a mis compañeros que luchaban por aprender el cálido "lenguaje del amor de madre".
También compartimos refrigerios con los empleados que trabajan en el campo y expresamos nuestros sentimientos.
Gracias a esto, el ambiente es más energético y todos damos un paso al frente para ayudarnos unos a otros, creando una vida laboral positiva.
Disfruto yendo a trabajar.
Para niños que van a academias mientras están de vacaciones en casa y preparándose para el colegio y el nuevo semestre.
"¡A por ello!" “Te prepararé algo delicioso. ¿Qué quieres comer?” “Buen trabajo~♡ Gracias por ser bueno conmigo hoy”, “Te amo”, etc.
Al practicar más el lenguaje de amor de la madre, aumentan las conversaciones y expresiones, creando una familia más dulce. 